Cómo financiar campañas de marketing digital
Toda empresa se plantea financiar campañas de marketing digital en algún momento de su trayectoria. ¿Necesitas mejorar la visibilidad de la empresa? ¿Quieres conocer mejor a tu público y conectar con él? ¿O tal vez te planteas dar el salto internacional? Si estás en algunas de estas situaciones, es el momento.
Te lo decimos sin rodeos: el presupuesto para marketing digital es obligatorio. No importa el tamaño de tu empresa, como mínimo necesitarás posicionarte en una comunidad local. Lo que no se comunica no existe. Así de claro.
Hablamos de esto largo y tendido en nuestro webinar sobre cómo internacionalizar tu Ecommerce, sin tirar de ahorros:
En el webinar, te contaremos las claves para hacerlo sin usar todos los fondos de reserva, además de la experiencia en primera persona de un caso de éxito como Mi Cuento, que vende en más de 100 países.
Puedes tener un gran producto, proporcionar una atención al cliente exquisita o tener los precios más competitivos del mercado. Si tu público objetivo no te conoce, no podrá elegir lo que le ofreces.
¿Qué ventajas te ofrece el marketing digital? Repasamos algunas de ellas:
El marketing digital ha traído importantes avances respecto al tradicional: reduce costes, permite hacer análisis más efectivos, es más fácil hacer cambios durante la campaña, permite segmentar y se obtienen resultados más concretos.
Esto no significa que haya que renunciar por completo al marketing tradicional. Entre otras cosas, permite la interacción cara a cara, luego merece crédito.
En el mundo de los negocios online, los proyectos suelen estar dirigidos por emprendedores que se han creado a sí mismos.
También conocidos como Juan Palomos. Si es tu caso, posiblemente te habrás visto ajustando detalles de la web, haciendo fotos de productos y creando anuncios en Google Ads. Diseñador, fotógrafo y marketero, todo en uno.
Admiro profundamente a cada uno de vosotros. En serio. Le doy más valor a crear un negocio online sin ayuda que a cualquier título universitario.
Pero también quiero plantearte una idea muy clara: para llegar a ciertos volúmenes, simplemente no puedes hacerlo solo.
Imagina que eres repartidor de un delivery tipo Glovo o Uber Eats.
Mensualmente, con tu vieja bicicleta de montaña, que también usas para tus salidas de fines de semana, haces un número de repartos al mes que, quitando impuestos u otros gastos, te permiten generar 600€ al mes.
Ahora imagina que quieres hacer crecer tu negocio como rider. Puedes hacerlo comprando una bicicleta eléctrica, que te permitirá hacer el doble de pedidos, pero cuesta 3.000€.
Casi nada.
Podrías ahorrar mes a mes como una hormiguita, aunque generando sólo 600€ obviamente te va a costar bastante tiempo ahorrar 3.000€.
Pero también podrías financiar la compra de la bicicleta. Vamos a hacer las cuentas.
Pero ahora, vamos a poder generar 1.200€, y eso hace que salgamos ganando en la operación. Puedes verlo en la siguiente tabla:
Como ves, incluso teniendo que pagar un préstamo en un plazo muy corto de 6 meses, estamos obteniendo 70€ más de ingresos mes a mes, teniendo más de 4.020€ de beneficio en el periodo.
Y los números son aún más evidentes cuando pasan los 6 meses, porque nuestra flamante bicicleta eléctrica ya se habrá convertido en un activo, dejando de pagar el préstamo.
Ahora la diferencia es sencillamente abismal. El capital que te han prestado se ha convertido en un activo que te permitirá multiplicar X2 tu negocio en menos de 1 año.
Una mejora del 64% de un negocio en sólo un año, casi nada.
La financiación en este caso ha sido una condición de posibilidad. Es decir, sin ella jamás hubieras podido conseguir ese dinero, o hubieras tardado varios años en ahorrar la cantidad que necesitabas para invertir en la bicicleta eléctrica.
Tal y como explicaba arriba, la financiación es una barrera fuerte a la que tienes que enfrentarte para hacer crecer tu negocio. Estamos seguros de que podrías emprender montones de acciones útiles con un poco más de presupuesto.
Afortunadamente, el mercado dispone de un amplio abanico de opciones a tu medida. Solo necesitas informarte bien, analizar tus necesidades, sopesar pros y contras y tomar una decisión bien fundamentada.
Vamos a repasar algunas de las opciones más frecuentes para encontrar financiación:
Financiar campañas de marketing digital con ahorros propios supone una ventaja obvia: la de no pedir prestado. Nada es gratis, y menos aún el dinero, así que si pides dinero tendrás que devolverlo con intereses.
La autofinanciación no exige trámites legales, es inmediata y ofrece independencia. Pero tiene una gran desventaja, la reducción de ahorros puede generar incertidumbre.
Tener un colchón financiero personal ofrece la tranquilidad de que se podrán afrontar necesidades diarias. Si desaparece o se ve reducido considerablemente, aumenta la inseguridad, por lo que la autofinanciación debería ser una opción sólo cuando estás empezando tu negocio, no cuando quieres escalarlo.
Hasta ahora, recurrir al banco ha sido lo más frecuente cuando se trataba de buscar financiación para inversiones. El producto estrella es el préstamo o crédito clásico: el banco presta una cantidad y, en un plazo determinado y a través de cuotas, el cliente debe devolverlo con un tipo de interés ya aplicado.
Los préstamos bancarios permiten tener control en tiempo real sobre la deuda, ofrece garantías jurídicas, se pueden cancelar de manera anticipada y es posible negociar condiciones adaptadas a la necesidad.
Sin embargo, las entidades suelen solicitar requisitos y condiciones rígidas, incluyendo la justificación de ingresos o avales personales. Son inflexibles a la hora de satisfacer las cuotas, y aplican más intereses o penalizaciones si te retrasas.
A todo esto hay que sumar las comisiones y los gastos de gestión, que aumentarán si necesitas refinanciar, reunificar o hacer alguna otra operación.
Otra fuente tradicional de financiación de proyectos son las ayudas y subvenciones públicas. La gran ventaja de crecer a través de este tipo de financiación es evidente: algunas de estas subvenciones y ayudas tienen tramos de no reembolsables o condiciones de amortización muy favorables.
Sin embargo, también tiene algunas pegas. La más importante es que las ayudas públicas no están adaptadas a la realidad del mercado. Por eso muchas ayudas quedan desiertas. Como ejemplo, mira en qué han quedado estas ayudas de pilotos de tecnología 5G.
Tenían 45 millones de euros para financiar proyectos, pero no se repartió ni un 30%
¿Por qué ocurre esto? Por varios motivos
El tiempo es oro, y los plazos de gestión de estas ayudas puede ser de varios meses, o incluso años. Además, participar de estas ayudas suele necesitar grandes memorias para aplicar o informes justificativos de la inversión.
También son muy rígidas. Las ayudas se entregan con un contrato hecho con la administración por lo que la flexibilidad brilla por su ausencia.
Siendo honestos, ¿de verdad crees que una empresa experta en redes y tecnología 5G aplica a este tipo de ayudas? Si son competitivas en ese área de negocio, no van a faltarle clientes y proyectos, por lo que estas trabas temporales y burocráticas son una losa que las hace poco atractivas.
En el siguiente gráfico hemos comparado estas opciones frente a la opcion de financiarse con EvenFi
Los inversores son particulares o empresas de capital riesgo a los que se puede acceder en las rondas de financiación. Brindan apoyo a compañías emergentes que necesitan financiación, pero a las que se atribuye un elevado potencial.
En esta categoría podemos incluir a los fondos de venture capital. Invierten en startups a cambio de participación en el capital de la empresa, de manera que son propietarias de parte de la compañía y pueden tener representación en el consejo de administración.
De manera parecida funcionan los proveedores de venture debt o préstamos convertibles en acciones. Pero hay diferencias de calado que hacen que venture debt sea percibida como una opción más conveniente que venture capital para algunas empresas: no hay riesgo de perder el control sobre la empresa porque el inversor no tiene representación, y la deuda se salda abonando los intereses.
Sin embargo, la búsqueda de un inversor que conecte con el negocio y su filosofía puede llevar bastante tiempo. Y, dependiendo del mecanismo elegido, se puede perder parte del control del negocio. Por eso, recurrir a inversores para financiar una campaña de marketing digital no parece la mejor opción ya que el tiempo y la agilidad en las decisiones es fundamental.
El crowdlending es un modelo de financiación en el que personas particulares o pequeñas compañías prestan pequeñas cantidades de dinero a una empresa. A cambio, reciben un retorno previamente estipulado en un contrato de préstamo.
Para una empresa, el crowlending supone una vía rápida de financiación para acometer acciones como una campaña de marketing digital. Las plataformas que sirven de punto de encuentro entre inversores y empresas ofrecen varios productos, de manera que se ajustan a sus necesidades.
Así pues, se establece una horquilla amplia tanto de duración como de importe al que acceder. Es también una vía rápida de financiación, para la que no se solicitan garantías y que permite la devolución anticipada gratuita.
También resulta atractivo para los pequeños inversores. En el modelo de EvenFi, por ejemplo, se puede invertir un importe mínimo de 20 euros, no se cobran comisiones y el rendimiento anual es de hasta el 9%.
En vista de lo anterior, el crowlending se erige como una de las mejores vías para financiar campañas de marketing digital. Aunque no lo hagas con nosotros, si estás pensando en lanzar una campaña de crowdlending asegúrate de buscar una plataforma que te de confianza y unas condiciones ventajosas, además de ser flexible en los tipos de financiación.